En tu pecho escondo mi timidez
mientras mis manos
rodean tu espigada figura
liberando en mi interior
energías ardientes y positivas.
Mis besos prueban el sabor
de tu lápiz labial con rojo de pureza
pintados en toda la extensión de tus labios.
Nos besamos a fuego intenso
sin parar de afuera hacia dentro.
Tus manos en mis hombros
me hacen sentir como un todo tuyo.
Nos seguimos besando
sin despegar nuestros labios,
perdidos en tiempo y en espacio.
Solo necesito escuchar un te amo,
no de tu boca ni de tus palabras,
solo dímelo con el alma
por medio de tu mirada,
gestos y de tus manos
en mis hombros.
Necesito que me ames
con razón o con locura
como yo de ti en todo momento.
Necesito que vivas para ser feliz,
con solo mirarte aquí y en todas partes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario