Dos amigos debaten sobre
religión, uno creyente y el otro filósofo (ateo):
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El creyente le dice a su amigo ¿Por qué no crees en dios?
- El filósofo le responde: “porque jamás voy a creer en alguien a quien
no veo ni oigo”
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El creyente sostiene: “pero en alguien tenemos que creer”
- El filósofo le dice: “siendo así, no estoy obligado a creer en tu
dios, entonces… tú sigue creyendo en tu dios y yo creeré en Zeus, máximo dios
del Olimpo que jamás oprimió a su pueblo para que crea solo en él, porque
compartió su deidad con otros dioses”
-
“estás totalmente loco!!”, le replicó el creyente, “Zeus solo es un dios
que pertenece a la mitología griega”
- El filósofo termina de responderle, “entonces ya somos dos los que
estamos totalmente locos, yo por creer en un dios que es un mito griego, y tú
por adorar a otro dios que también es un mito... tú tienes tu dios y a tu
biblia, y yo a Zeus y la odisea, dos locos que tontamente tenemos a dioses
distintos solo porque estamos obligados a creer en alguien, en un ser superior,
eso se llama irracionalidad”.
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