Me pregunto si me buscarías el día
que el mundo olvide tu nombre
y aquel hombre que profesas amor
solo lágrimas te sabe dar.
Me pregunto si me desprecias,
yo te miro con ojos que acarician tu ser
y tu mirada me llena de miedo,
de nervios y también de sueños.
Me pregunto si sabes mi nombre,
casi no me hablas y si me hablas
no me nombras.
Me pregunto ¿Dónde estás?
Si te busco no te encuentro
y si te encuentro, te escondes de nuevo.
Me pregunto si has leído mis cartas,
no te hablan de ti ni de mí;
solo hablan de un amor desperdiciado
que lloran en mil hojas.
Me pregunto si sueñas
bajo las mismas estrellas que yo,
bajo la misma luna;
aunque me parecen que son dos.
¿Son dos soles o dos lunas?
Porque cuando despierto
a veces pienso que no existes tú,
que eres solo mi dulce sueño
o ¿será que no existo yo?
Me pregunto si te amo
o si solo eres un capricho o un gusto, no lo sé.
Solo sé que cuando te veo
Mi día deja de ser gris
y cuando no, me siento morir.
En tu ausencia te extraño más y más,
que hasta mi soledad pregunta ¿dónde estás?
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